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Corderitos de Expiación...O de: ¿Cómo Hitler se robó al conejo rosa*?



En una imagen donde los niños cambian balones por cráneos para jugar, un regalo parte de nuestro trabajo en A.I. y cómo el conejito con casco junto con la imagen se vuelven grises y sombríos.
Un minuto de silencio para todxs los que sufren esto, perder la inocencia por que se la han arrebatado, escuchen por un minuto los latidos de su corazón, todos son lo mismo ¿Verdad?
¿Entonces por qué las diferencias?
¿Por qué odiarnos tanto?
Hemos estado pensando mucho en las guerras y guerrillas. ¿Por qué? No solamente por mi Tesis: que las trata bastante sino por todo, lo injustas que son, lo difíciles y lo malo que es juzgar a las personas que las viven o las sobreviven. La Vida misma es una Guerra hermanitxs míxs Pedí a Dios por todxs nuestrxs hermanxs iraquíes, iraníes, hondureños, sudafricanos, coreanos, mexicanos (Sí, ¡mexicanos también!) que viven en guerra, y por nuestra guerra espiritual del día a día con cada unx de nosotrxs mismxs.
Hoy encontramos un escrito antiguo con fecha del 3 de abril 2006, cuando miramos la película “Voces Inocentes” por segunda vez, normalmente el cine nos apasiona demasiado, tanto que lo analizamos hasta en el más mínimo detalle, recuerdo la indignación que sentimos y eso que la vida no es como en las películas, en vivo y en directo es lo más horrible que pueda existir; comprendiendo los mensajes y escudriñando casi pixelarmente cada espacio de la pantalla, eso en conjunto a nuestro Rerereliokiteranyfninirereliokiliokeo exagerado y desvivencia por la triste humanidad nos hicieron “plasmar el alma” en éstas palabras ese día:


“La Guerra es cruda, sea grande o sea pequeña; la guerrilla en Salvador, demuestra que la más grande cualidad del ser humano y el dilema de una sociedad en detrimento moral es ser inhumano. Las personas para ser realmente libres no deben valerse del uso de la violencia y mucho menos tan generalizado, la Libertad es en primer lugar una lucha interna. Si el poder va a residir en un pueblo, debería de cumplirse realmente y con todo el deber de Ser: “La Democracia.” El reclutamiento de niñxs sólo da signos del miedo constante de los adultos que no saben salvaguardar sus deudas, que no están en paz consigo; que no han sabido conciliar su libertad y su responsabilidad de ser justos y mantener la Justicia ante las vorágines crecientes de seres que evolucionan sólo con un propósito: DESTRUIRQue se necesita del uso de corderitos de expiación para no hacerse cargo cada quien de su culpabilidad en los hechos que han decidido cometer y que sin lugar a dudas se viven “a sangre fría.” Porque el hombre es muchas veces peor que un lobo; LA NATURALEZA NO EXIGE LO QUE NO DA, así pues también: ¿En quién cabe la conciencia de que sin niñez no hay cambio? La Juventud es el Presente y la Niñez el Futuro. Pero seguimos “luchando”, seguimos en esta farsa de la toma oligárquica de las posesiones ajenas cuando déjenme decir que: ¡LA DIGNIDAD HUMANA NO ES POSESIONABLE NI ESTÁ EN VENTA! En las Malditas creaciones humanas llamadas “ Capitalismo” y “Urbe civilizada” Es así como doy por concluida esta polémica, no sin antes recordar que a pesar de todo “ La ley del más Fuerte” se sigue cumpliendo. ¿Por qué demonios? ¡Cómo mejor no van los norteamericanos y le declaran la Guerra a quienes están a su nivel! ¿Por qué? Por que “debajo del agua” están en esos “países tercer y cuatermundistas” todas las reservas energéticas que producen y proveen a los demás, y el cómo esos infernales humanoides se dedican a sobreexplotar, con el pretexto de “Fuerzas y Coaliciones de Paz”, “Reformas Energéticas”, “Tratados de Libre Comercio”, “Reservas Ecológicas Naturales”. Por eso se levantan los pueblos, por que nadie quiere ser marioneta de nadie. Es cierto que: “Cada quien cosecha los frutos que siembra” Pero también cada quien decide si cortarlos o no. Compartir a la Fuerza no es Compartir. "Guerra siembras, Guerra cosechas”.


* “Cuando Hitler se robó el conejo rosa” es el título de un libro magnífico que recomiendo sobremanera, para que comprendan por qué el obligar a crecer a lxs niñxs les resta de lo más hermoso que tienen: Su Inocencia y sus sonrisas sinceras. SU PAZ, la cual es la misma Paz que aliviaría al Universo no sólo al planeta con sus continentes y países.